Prepare unas deliciosas Alitas a la Parrilla
- Los ingredientes:
- 14 alitas de pollo enteras cortadas en alitas y drumettes
- Sal y pimienta al gusto
- Salsa o glaseado
Tiempo de preparación: 30 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Porciones: 4–6
Ya sea para disfrutarlas mientras ves el partido en casa o en una fiesta estilo tailgate antes del juego, las alitas de pollo son las favoritas y parte esencial del menú de todo experto en parrilladas. Hoy en día, hay quienes las preparan al horno, algo que no le hace justicia a este clásico. Aquí te explicaremos cómo preparar auténticas y espectaculares alitas de pollo en tan solo siete pasos.
Prepara las alitas.
Las alitas de pollo tienen tres partes: la punta, la sección media y el drumette. Es probable que vengan en una sola pieza cuando las compres en el supermercado. No hay problema si las cocinas así, pero la mayoría de las personas prefieren las alitas ya cortadas. Solo tienes que remover la punta del ala con un cuchillo afilado. Esta parte no tiene mucha carne, así que descártala. Luego, corta entre las articulaciones y separa la articulación central del drumette.
Adoba las alitas.
Las dos maneras básicas de sazonar las alitas son con una marinada líquida o con un sazonador en polvo. Las alitas absorben bien las marinadas; es por ello que ese método es tan popular para añadirles sazón. Una vez preparadas, coloca las alitas en una bolsa hermética o en un recipiente con tu marinada favorita. Marínalas por lo menos durante una hora antes de asarlas. Si optas por el adobo seco, solo tienes que sazonar las alitas crudas con tu adobo en polvo favorito antes de colocarlas en la parrilla.
Prepara un fuego de dos áreas.
Coloca las briquetas según la configuración del fuego dividido en dos áreas. Mantén las briquetas calientes en un solo lado de la parrilla y deja el otro lado vacío. Sellarás las alitas en el área caliente y las terminarás de asar en el lado más fresco.
Sella las alitas.
Coloca las alitas de pollo en el área de la parrilla que esté más caliente. Séllalas por todos lados hasta obtener una piel dorada y crujiente. El pollo se quema con facilidad, sobre todo cuando la marinada o el adobo contienen un alto nivel de azúcar. Por eso, no dejes de controlarlas y voltéalas a menudo para que se quemen.
Mueve las alitas al área más fresca.
Una vez que estén doradas por todos lados, muévelas al lado menos caliente de la parrilla para que se terminen de asar. Cúbrelas con la tapa y cocínalas hasta que las alitas alcancen una temperatura interna de 165°F. Un termómetro digital de lectura instantánea puede ayudar a comprobar la temperatura. Por lo general, las alitas tardan de 8 a 10 minutos en cocinarse completamente.
Añade la salsa o el glaseado.
Si quieres añadirle salsa o glaseado a las alitas, hazlo unos minutos antes de que se terminen de cocinar. Cúbrelas con la salsa o el glaseado y tapa la parrilla para que se caramelice sobre la piel. La mayoría de las salsas dulces se queman fácilmente, por lo que es preferible no dejar las alitas desatendidas.
Sirve las alitas.
Sirve las alitas directo de la parrilla, no es necesario dejarlas reposar. Puedes acompañarlas al estilo clásico con apio (celery) y aderezo de queso azul. O con una de las tantas salsas disponibles en el mercado, como la salsa barbecue, el aderezo ranch, o la salsa dulce oriental con chile.